¿QUÉ PASA CON LA MUELA?

No hace mucho tiempo La Muela tenía unos 1000 habitantes, menos de la mitad de los molinos que hoy decoran y distinguen el viaje a Zaragoza y apenas aparecía en los periódicos. Pero los molinos fueron multiplicándose, cada vez más gente se quedaba a vivir y la villa crecía a pasos agigantados. El chiste entre los vecinos de la comarca era recurrente: “Algún día La Muela y Zaragoza se unirán, con tanto polígono…”. Los mismos vecinos mirábamos de reojo y con algo de envidia todos los avances de este pueblo, que nunca había resaltado entre los otros que componen la comarca de Valdejalón. Viajes a precios de costo o gratuitos, construcción de museos, auditorio, plaza de toros… Aquello no parecía real. Cuando llegabas al pueblo y preguntabas a los vecinos de siempre por alguna de las calles nuevas se quedaban sin respuesta. Sin duda, el desarrollismo iba a un ritmo difícil de seguir para las gentes de a pie.

Y se destapó el pastel.

La Muela empezó a salir en prensa, televisión… y en realidad no fue tan sorprendente. “Tanto dinero… el dinero corrompe”, pensaban muchos. Después de toda la trama de Marbella, julianes muñoz, pantojas y demás, La Muela era noticia por una trama de corrupción urbanística. Cohecho, malversación de fondos, tenencia ilícita de armas… y la alcaldesa Pinilla en los juzgados de La Almunia, ¡de película!
A pesar de los grandes avances que la alcaldesa logró para el pueblo, todavía parece que sobró dinero para malversar, presuntamente. Así, la alcaldesa María Victoria Pinilla pasó un tiempo entre rejas, pero en la trama de corrupción que se destapó no solo aparece su nombre: hay 30 imputados más.
La prisión preventiva terminó, y con la presunción de inocencia bajo el brazo, Pinilla retomó sus labores al frente del Ayuntamiento de La Muela. Mucho revuelo: la oposición se quedó casi desmantelada, solo el PP quiso mantenerse en la oposición a un ayuntamiento que moralmente no tiene sentido.
La última de Pinilla: pedirle explicaciones a los medios de comunicación. Y ya tiene respuesta. Se aferra con uñas y dientes a la presunción de inocencia. Pero olvida otras cosas. La libertad de expresión y de información que han cumplido esos medios a los que reclama explicaciones también están en la Constitución. Pero eso parece importarle poco...